Les piden ser conscientes de los riesgos potenciales de transmisión por el contacto directo entre personas.
Espacios designados, ningún contacto físico, desinfección constante y lavado de manos antes y después son unas recomendaciones emitidas en la guía de salud para repartos del ITDP.
“Las personas repartidoras deben ser conscientes de los riesgos potenciales de transmisión del Covid-19 por el contacto directo entre personas”, asegura el texto.
El documento describe por pasos todo el proceso que debe seguir el personal para empaquetar y entregar el pedido a los repartidores, los lineamientos para que el repartidor entregue el paquete, las instrucciones para pagos en efectivo y también recomendaciones para los clientes.
La guía se divide en dos protocolos, uno para comida y otro de recomendaciones generales de higiene para otro tipo de envíos.
“Esta guía es una recopilación de recomendaciones emitidas por varias agencias gubernamentales de salud pública de diferentes países y de medidas incorporadas por distintas empresas de envío de alimentos para personas repartidoras.
“Para su desarrollo se realizó una investigación documental exhaustiva, incorporando también la opinión de organizaciones que hacen repartos“, aseguró el Instituto de Políticas Públicas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP).
En el documento se explica que la guía debe utilizarse en su totalidad para que funcione y disminuya el riesgo de contagio en todo momento.
Agrega que se debe establecer un espacio para que los repartidores, luego de lavarse las manos, recojan la comida manteniendo 2 metros de distancia del personal de los establecimientos.
Después, el repartidor debe desinfectar las áreas de contacto frecuente, como volante o manubrio, así como seguir ciertas instrucciones para los pagos en efectivo.
En cuanto a los clientes se les recomienda hacer pago electrónico y fijar un lugar con el repartidor para que ahí se deje el pedido, dependiendo del tipo de domicilio.
“En la cadena para el reparto de comida y servicios, el eslabón más vulnerable son las personas repartidoras.
“Tienen constante contacto con distintos establecimientos, con vehículos de reparto y con consumidores finales. Como usuarios de servicios de reparto, debemos proteger a este eslabón indispensable para que las medidas de distanciamiento social funcionen”, explica la guía.
También se incluye un protocolo para los establecimientos, en caso de que un empleado enferme, las recomendaciones de higiene al personal y a las empresas de envíos.