Mientras los hoteleros de Cancún auguran que podrán llenar sus hoteles al 100 por ciento de controlarse los rebrotes por coronavirus, los hoteleros de Riviera Maya se muestran escépticos y nada optimistas, pues creen, entre otras cosas, que el aumento de casos de COVID en Estados Unidos hará mella en la llegada de turistas.
Omar Ortiz, presidente del Comité de Pequeños Hoteles y Turismo de Playa del Carmen, no se atreve a dar un pronostico para fin de año tal y como están las cosas. “Pretender que vamos a cerrar con números similares en cuanto a ocupación, es imposible, en primera porque nos encontramos en semáforo amarillo, estamos operando al 60% de nuestra capacidad, eso retrae mucho el turismo”.
De hecho, las ocupaciones en Riviera Maya distan en 14 puntos porcentuales a las registradas en Cancún, como avanzó Riviera Maya ha visto disminuir sus datos de ocupación en los últimos dos meses pasando de un 33 por ciento en octubre a un 27.7 por ciento en el mes de noviembre.
Antes de la pandemia, Riviera Maya tenía un promedio de ocupación del 80 a 85 por ciento que mantenía durante casi todo el año.
Por su parte, el presidente de los hoteleros de Cancún, Roberto Cintrón ha destacado que la recuperación económica en el sector turístico va muy bien y que si logran pasar a semáforo verde, los siete mil cuartos que quedan por abrir podrían reanudar actividades y ello conllevaría a más ocupación, empleos y derrama para el estado, con lo que se podría cerrar 2020 con buenos números.