El papa Francisco hizo un llamado a favor de la liberación de “todos” los prisioneros de guerra y del final de la tortura, que es algo “inhumano“, al término de la audiencia general celebrada este miércoles en la plaza de San Pedro del Vaticano.
“Nuestro pensamiento en este momento, de todos nosotros, está con las poblaciones en guerra. Pensemos en Tierra Santa, Palestina, Israel. Pensemos en Ucrania, en la martirizada Ucrania. Pensemos en los prisioneros de guerra: que el Señor mueva la voluntad para liberarlos a todos”, dijo el pontífice.
El papa, que dedicó su catequesis de la jornada a la templanza, también se refirió a la tortura.
Y hablando de los prisioneros, me vienen a la mente aquellos que son torturados: la tortura de los prisioneros es algo muy feo, es inhumano. Pensemos en las tantas torturas que hieren la dignidad de la persona y en los tantos torturados. Que el Señor ayude a todos y bendiga a todos”, añadió.
Francisco llegó a la plaza de San Pedro, donde le esperaban unos 20 mil fieles, a bordo del “papamóvil” descubierto y recorrió todos los sectores para saludar y bendecir de cerca a los peregrinos presentes, procedentes de todo el mundo.
Antes de entrar en la plaza, el papa Francisco subió a cuatro niños en su vehículo que le acompañaron mientras se abría paso entre la multitud de fieles.
El papa dedicó su catequesis a la “cuarta y última virtud cardinal: la templanza” y dijo que la persona que la tiene “logra mantener unidos los extremos: afirma principios absolutos, reivindica valores innegociables, pero también sabe comprender a los otros y mostrar empatía por ellos”.