El conjunto de Girona festejó su histórica clasificación a la Champions League en la grama de Montilivi justo después del triunfo con remontada de este sábado ante el Barcelona por 4-2 en el marco de la Fecha 34 de LaLiga.
En cuanto el árbitro señaló el final del cotejo, el logo de la Champions apareció en el videomarcador del estadio y comenzó a escucharse el himno de la emblemática competición europea, mientas la afición, entregada, se rendía a los jugadores y a su entrenador, Míchel Sánchez.
Los jugadores del equipo catalán dieron una vuelta de honor para agradecer el apoyo a su afición, que volvió a llenar las gradas con más de 14 mil fanáticos.
Sin duda, Girona ha tenido una campaña de película, algo que quedará retratado en la memoria de los aficionados que han vivido esta época donde su equipo ha escrito historia.