Francia y Suiza iniciaron una “operación excepcional” en sus fronteras mientras que la capital francesa se resguarda para el inicio del magno evento.
Los cuerpos de policía de Francia y Suiza iniciaron esta madrugada una “operación excepcional de control” en los 570 kilómetros de frontera entre ambos países, con el fin de luchar contra el crimen transfronterizo y los fraudes aduaneros en víspera de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Paris 2024 este viernes.
Efectivos de cuerpos de policía y gendarmería reforzaron con este motivo los habituales puestos de vigilancia aduanera, en una operación “inédita”, indicó en un comunicado la Oficina Federal de Aduanas suiza.
La operación implica a siete cantones suizos (Ginebra, Vaud, Valais, Neuchatel, Jura, Basilea-campo y Basilea-ciudad) así como cinco departamentos franceses (Alta Saboya, Doubs, Belfort, Alto Run y Jura), que conforman la frontera entre ambos países.
Desde la primera noche de operaciones, se han efectuado controles a más de 500 vehículos en el cruce de frontera, así como de 900 personas, algo que de continuar en las próximas semanas podría ralentizar los tiempos necesarios para cruzar de un país a otro, algo que cada día hacen miles de trabajadores (en su mayoría personas que viven en territorio francés pero tienen su empleo en Suiza).
París está ya totalmente blindada para la gran ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos, que este viernes reunirá a unos 328 mil espectadores y un centenar de gobernantes o responsables de organizaciones internacionales.
La ceremonia, un desfile de barcos por el Sena en el centro monumental de París, promete originalidad y espectacularidad, pero está siendo también una pesadilla para la seguridad, la logística y los transportes.
“Estamos listos, será un espectáculo deslumbrante, que hará sentirse orgulloso al país, que llevará la felicidad al mundo entero”, prometió este jueves la ministra francesa de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, en declaraciones la radio pública France Info.
Cerca de 200 barcos, entre los que transporten a unos 8 mil deportistas y los de seguridad y apoyo, transitarán durante seis kilómetros entre los puentes de Austerlitz y Jena.