Para muchas de las comunidades indígenas de nuestro país, la Semana Santa representa una de las festividades más importantes. Durante este periodo, se realizan ceremonias que integran tanto la cosmovisión ancestral de estas sociedades, como prácticas y rituales católicos que llevados por los misioneros. En la región noroeste de México, diversos grupos como yoremes, yaquis, rarámuris, warihó y los o’ob han adoptado diferentes tradiciones que, sin embargo, mantienen puntos en común.
La figura del fariseo, conocidos también en algunas regiones como judíos, quienes representan un ejército maligno en búsqueda del hijo de Dios; las ramadas, en las que se hace un montículo de tierra, colocando una cruz, lugar que representa la guardia y el poder militar de esta iglesia; o el conti (procesión ritual), realizada cada viernes de la cuaresma, que representa la búsqueda y persecución de Cristo.