El pasado lunes, mediante sus redes sociales, la jugadora de los Panzas Verdes de León, Ana Campa, aprovechó su Twitter para hacer pública su situación, esto después de haberse lesionado el pasado mes de septiembre en un entrenamiento con La Fiera.
Campa, que podría no volver a las canchas de manera profesional, publicó en sus redes que sufrió un golpe en el rostro el pasado mes de septiembre, razón por la cual su visión comenzó a verse afectada, algo que al equipo esmeralda pareció no haberle preocupado mucho.
De acuerdo al testimonio de Campa, el club no se preocupó por darle la atención médica que requería, ni en ese momento ni posterior al diagnóstico (el cual no es nada esperanzador para Campa) asegurando que, a siete meses de su lesión, nadie del club se ha acercado con ella ni siquiera para saber cómo se encuentra.
“Lamentablemente, mi club no me ha dado el apoyo esperado, no tuve atención de inmediato ni se preocuparon por atender mi pérdida de vista en las semanas posteriores. Por ello, busqué por mi propia cuenta un especialista y terapias en México y en Estados Unidos.
Como soy Mexicoamericana y al no ser atendida en León, regresé a mi casa en Texas unas semanas para obtener algo de atención”, se lee en la publicación de Campa en sus redes sociales.
La jugadora cuenta que viajó a Estados Unidos para ser atendida de su pérdida visual y que, por el momento, se encuentra haciendo trámites en el Instituto Mexicano del Seguro Social donde, al parecer, siempre le falta un trámite para seguir avanzando con su incapacidad, tal y como se lo solicitó el cuadro esmeralda.