Durante la contingencia sanitaria
Durante la contingencia sanitaria por el Covid-19, los denominados bares “clandestinos” se han multiplicado en Chetumal, por lo que el sector empresarial formal exige la clausura de por lo menos 120 lugares donde venden bebidas alcohólicas de forma ilegal.
Joaquín Ismael Noh Mayo, presidente de la Unión de Propietarios de Bares, Restaurantes y Similares (Uprobars) en Chetumal, exigió la intervención de la Policía Cibernética, de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), y Dirección de Fiscalización municipal para detectar y posteriormente clausurar los bares clandestinos, donde además de fomenta la prostitución.
El líder empresarial del sur dio a conocer que esos lugares inician operaciones principalmente a partir de las 10 de la noche, con ofertas de bebidas alcohólicas y algunos, hasta de mujeres, donde la función es atender al cliente de la forma en que lo soliciten, por lo que no se descarta que ofrezcan servicios sexuales.
Indicó que son “vinaterías” sin licencia con servicios adicionales, las que se aprovechan para hacer su “agosto”, mientras los negocios formales respetan los horarios establecidos, para operar durante la pandemia. “Más de 120 clandestinos de venta de cerveza y licores en redes sociales, con servicio a domicilio, esto todos los días, se anuncia después de las 10 de la noche, desde el inicio de la cuarentena”, dijo Noh Mayo.
Agregó que por WhatsApp circulan anuncios de las personas que se dedican al clandestinaje. “En estas se promocionan las bebidas alcohólicas y solicitan chicas ‘de mente abierta’ para trabajar en estos negocios”, lo que da a entender que deberán cumplir con los deseos de los clientes, así sean de índole sexual.
El sector comercial formal de Chetumal, dedicado a la venta de bebidas alcohólicas tiene restricciones, como parte de las medidas para prevenir los contagios y evitar que las personas transiten en las calles a altas horas de la noche.