El alza en el aumento de casos por coronavirus podría persistir hasta el 2025.
Un grupo de epidemiólogos internacionales construyeron una serie de escenarios posibles, a corto y largo plazo, sobre el futuro que deparara a la interacción entre la humanidad y el COVID-19, y todos coinciden en que el virus ha llegado para quedarse por un rato.
Entre ellos, los especialistas consideraron que si la inmunidad del SARS-CoV-2 es menor a 12 meses, como es el caso de otro tipo de coronavirus humanos, el alza en el aumento de casos al año, podría persistir hasta el 2025.
Un punto importante para los epidemiólogos es que la pandemia se propaga a velocidades distintas, dependiendo de la región, por ejemplo, países como China, Nueva Zelanda y Ruanda han alcanzado un bajo nivel de casos, gracias a confinamientos duraderos.
En cambio, en localidades como México, Estados Unidos y Brasil, en donde las restricciones se han atenuado, y los bloqueos se levantaron demasiado pronto o no se activaron en toda su extensión, la aceleración de los brotes es visible.
Por lo que el modelista de enfermedades infecciosas, Jorge Velasco-Hernández, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) examinó, en meses pasados, que si el 70% de la población mexicana hubiera practicado las medidas personales, como lavarse las manos y el uso de cubrebocas, así como confinarse voluntariamente desde el mes de marzo, el brote habría disminuido a finales de mayo y principios de junio.
El equipo de Velasco-Hernández consideró que los días festivos, celebrados durante la etapa de confinamiento, actuaron como eventos de propagación, al provocar altas tasas de infección, antes de que las autoridades decidieran reactivar la labor de algunos sectores económicos el pasado 1 de julio.
“El futuro dependerá mucho de cuánto se reanude la mezcla social y qué tipo de prevención hagamos”, dijo Joseph Wu, un modelista de enfermedades de la Universidad de Hong Kong, y aseguró que entre los modelos recientes, una de las estrategias más exitosas, han sido el confinamiento y el bloqueos de las ciudades. Sin embargo, expuso que no todas las personas lo cumplen, necesariamente.
Otras de las estimaciones de los expertos, publicadas en la revista “Nature”, tienen que ver con las decisiones tomadas por los gobiernos y la sociedad en general. Rosalind Eggo, modeladora de enfermedades infecciosas en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, opinó que “muchos lugares se están desbloqueando, y muchos lugares no. Realmente aún no sabemos qué va a pasar”.
Para los especialistas, distender las medidas de distanciamiento social, ha sido uno de los uno de errores que han cometido muchos países, ya que las personas suponen que los casos positivos decrecieron y por consiguiente, la pandemia está por terminar, “pero ese no es el caso. Nos espera un largo recorrido”, advirtió dice Yonatan Grad, epidemiólogo de la Escuela de Salud Pública de Harvard.
Este equipo internacional, llegó a la conclusión de que si el 50% al 65% de las personas persisten en la implementación de las medidas de distanciamiento social, que podrían efectuarse entre intermitencias, cada 80 días “podría ayudar a prevenir nuevos picos de infección en los próximos dos años”. Estas medidas, recomendaron que no debían abandonarse, pese a que se produzca una vacuna efectiva. En consecuencia, advirtieron que será necesario “cambiar la cultura de cómo interactuamos con otras personas”.