Earl Simmons, conocido artísticamente como DMX (The Divine Master of the Unknown, por sus siglas en inglés), ha muerto hoy en el hospital White Plains en Nueva York, tras haber estado hospitalizado cinco días debido a una sobredosis que detonó en un ataque cardíaco fulminante.
«Earl fue un guerrero que luchó hasta el final. Amaba a su familia con todo su corazón y apreciamos el tiempo que pasamos con él. La música de Earl inspiró a innumerables fanáticos en todo el mundo y su legado icónico vivirá para siempre. Apreciamos todo el amor y el apoyo durante este momento increíblemente difícil», dijo su familia en un comunicado. «Respete nuestra privacidad mientras lamentamos la pérdida de nuestro hermano, padre, tío y el hombre que el mundo conocía como DMX. Compartiremos información sobre su servicio conmemorativo una vez que se ultimen los detalles», añadió.
Por otro lado, el personal del hospital publicó lo siguiente: «White Plains Hospital extiende su más sentido pésame a la familia del Sr. Simmons, así como a sus amigos y legiones de fanáticos que expresaron su apoyo inquebrantable durante este momento difícil. Earl Simmons falleció pacíficamente con la familia presente después de sufrir un paro cardíaco catastrófico».
Simmons fue uno de los raperos estadounidenses más icónicos en la historia del rap, encabezando el Top 5 de los que más ha vendido, detrás de Eminem, 2Pac, Jay-Z y 50 Cent. Saltó a la fama a finales de los años noventa, resaltando por combinar la agresividad y la sinceridad emocional dentro de sus composiciones. A lo largo de su trayectoria musical llegó a posicionarse en las listas de éxitos, incluyendo cinco álbumes Número Uno en Billboard 200 EE.UU, así como en Billboard R&B/Hip-Hop Albums.
Su carrera dentro de la industria, por más de dos décadas, estuvo plagada de problemas legales y la lucha constante por su adicción a las drogas. Gran parte de la problemática revela sus raíces desde su infancia, en la cual sufrió de abusos y violencia, tanto emocional como física, por parte de su madre y las parejas de ésta. Consecuentemente, durante su adolescencia comenzó a crecer en las calles de Mount Vernon, Nueva York, criándose a lado de vagabundos, lo cual más tarde repercutiría en la personalidad que adoptaría y reflejaría como músico.
Siempre fue abierto respecto a sus problemas con el abuso de drogas, confesando que su consumo comenzó a los 14 años, cuando probó el crack. Además, sufría de depresión y trastorno bipolar, lo cual era canalizado en comportamientos agresivos con animales, así como robos que lo llevaron a ser arrestado múltiples veces. Desde la década de 1980, hasta el 2018, cumplió penalizaciones en prisión y estuvo en rehabilitación.
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A pesar de ser una noticia devastadora, su causa de muerte no ha sido inesperada, ya que no fue primera vez que DMX había sido internado debido a efectos de droga. El abogado del rapero, Murray Richman, confirmó que el viernes 2 de abril fue trasladado de urgencia al hospital, luego de encontrarlo en su casa de White Plains. Para ese momento ya había experimentado una insuficiencia pulmonar y cerebral significativa, por lo que fue necesario el uso de soporte vital y, consecuentemente, permaneció en estado de coma durante el tiempo que duró su hospitalización. Le realizaron una serie de pruebas de función cerebral, pero los esfuerzos fueron en vano, ya que el estado vegetativo del rapero era definitivo y la decisión de retirar el soporte vital fue confirmada por los familiares este viernes 9 de abril.
DMX en la historia del rap
A principios de los ochenta comenzó a rapear, hasta hacerse de un nombre local que lo llevó a conseguir un contrato con Columbia Records en 1992. A partir de ese suceso, comenzó a vincularse con raperos de renombre como Jay-Z, Ja Rule, The Lox y LL Cool J.
A finales de los noventa, DMX comenzó su apogeo comercial, encaminándose a la fama: en 1998 lanzó su primer sencillo, «Get at Me Dog», a través de la disquera Def Jam (la cual mantenía un contrato de distribución con Columbia Records). Esta pieza musical obtuvo la certificación de Oro, seguida de su álbum debut, It’s Dark and Hell Is Hot, el cual presentó una de sus canciones más icónicas, «Ruff Ryders Anthem». El disco se posicionó en la cima del Billboard 200 y desde ello ha vendido más de cinco millones de unidades.
Sus cinco discos que obtuvieron el puesto Número Uno en las listas, también fueron certificados una o más veces como Disco Platino. Su octavo y último álbum de estudio, Redepmtion of the Beast (2015) fue lanzado a través del sello Seven arts Music, sin la autorización de DMX.
Tras la muerte de Tupac Shakur y Notorious B.I.G., asumió el control como el reinante del rap hardcore. Siempre destacó por ser una potencia comercial con credibilidad artística y callejera de sobra, además de que todo en él era radicalmente intenso: desde su físico hasta su expresión áspera y ladradora, que hacía una combinación perfecta para su usual lírica relacionada con los perros. Su rápido ascenso al estrellato fue en realidad casi una década en proceso.
DMX permanecerá inmortalizado en la historia del rap al ser uno de los raperos más exitosos, con un peculiar estilo artístico, apasionado y sincero. Además, tuvo un gran impacto cultural e influencia que se extendió más allá de su audiencia principal.
Fuera de la música, ha dejado un legado familiar, siendo padre de 15 hijos que tuvo con mujeres diferentes. También era un cristiano devoto, quien decía que había encontrado a Dios durante una de sus sentencias de prisión y, a raíz de ello, continuó leyendo la Biblia todos los días durante toda su vida.
