Autoridad del gobierno ruso dice que Washington “envidia” los territorios de ese país y busca que otros países tengan acceso a recursos energéticos.
Un funcionario del Kremlin acusó a Estados Unidos de tratar de arrastrar a Rusia al conflicto ucraniano con el objetivo de debilitar a Moscú y efectuar un cambio de régimen, según una entrevista publicada el martes por una agencia de noticias gubernamental.
“Para EE.UU., Ucrania en y por sí misma no es un asunto de interés. Su objetivo es debilitar nuestras posiciones. Los estadounidenses están tratando de arrastrar a la Federación de Rusia a un conflicto militar internacional, y con la ayuda de los acontecimientos en Ucrania, provocar un cambio de régimen [en Moscú] y finalmente desmembrar nuestro país”, señaló Nikolai Patrushev, el jefe del Consejo de Seguridad del Kremlin, a la Rossiyskaya Gazeta.
Citando una acusación común en Rusia de que EE.UU. envidia a Rusia por sus territorios, Patrushev añadió que Washington estaba apuntando a los recursos energéticos del país.
“Los expertos estadounidenses (…) creen que Moscú tiene demasiados extensos territorios bajo su control. Ven una distribución de los recursos naturales como injusta, y creen que se deben tomar medidas para que otros Estados tengas acceso gratis a ellos”, dijo Patrushev.
Al mismo tiempo, el presidente Vladimir Putin dijo que, a pesar de los desafíos actuales, Rusia seguirá aplicando una política exterior que defienda sus propios intereses.
“La Federación de Rusia, sin importar la cantidad de presión [externa] que enfrenta, continuará con una política exterior independiente, que representa los intereses fundamentales de nuestro pueblo y está en línea con la seguridad y la estabilidad mundial”, dijo Putin en un mensaje a diplomáticos y empleados del Ministerio de Relaciones Exteriores por el Día de Servicio Exterior ruso.
Las declaraciones llegan un día después de que el presidente Barack Obama, en una conferencia de prensa junto a la canciller alemana, Angela Merkel; dijo que EE.UU. y sus aliados europeos estaban dando a la diplomacia otra oportunidad para resolver el conflicto en el este de Ucrania.
Sin embargo, Washington no descarta la opción de proporcionar armas “defensivas” para que Ucrania enfrente el conflicto con rebeldes separatistas prorrusos si es que fallan los esfuerzos diplomáticos.
Otra ronda de conversaciones de paz entre los líderes de Ucrania, Rusia, Alemania y Francia está prevista para el miércoles en Minsk, Bielorrusia.
Kiev y Occidente acusan a Rusia de haber instigado el conflicto como parte de los esfuerzos para desestabilizar a Ucrania en retribución por el derrocamiento de un presidente apoyado por Moscú y su nuevo curso a favor de Europa.
Rusia niega la acusación.