La inversión pública para ese fin será de alrededor de 55,000 millones de pesos, pero se requiere invertir entre 85,000 y 430,000 millones de pesos al año y de manera sostenida durante al menos una década, para garantizar la sustentabilidad y seguridad hídrica en el país.

Mientras especialistas plantean que México requiere invertir anualmente entre 85,000 y 430,000 millones de pesos al año de manera sostenida durante al menos una década, para garantizar la sustentabilidad y seguridad hídrica, el gobierno federal pretende invertir en 2024, alrededor de 55,400 millones de pesos, con lo cual el rezago en infraestructura en el sector se continuará acumulando.

De acuerdo con Verónica Martínez, consultora independiente del Banco Mundial, para cumplir con los objetivos del sector, en términos de acceso al agua de buena calidad, saneamiento, alcantarillado, entre otras clases de equipamiento, se requiere que el gobierno destine un presupuesto anual de 85,000 millones de pesos en un lapso continuo de los próximos 10 años.

Por su parte, Hugo Roberto Rojas Silva, consultor en economía del agua explicó que, en el año 2000, la Cepal determinó que para cumplir con los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), establecidos en la Agenda 2030, un país como México necesitaría invertir en el subsector de agua y saneamiento el equivalente a entre 0.25 y 0.30% de su Producto Interno Bruto y de manera sostenida, durante 10 o 15 años, lo cual no ocurrió.

Ante esa situación, continuó, el país presenta hoy un rezago importante y se explica porque se trata de inversiones que no son políticamente rentables.

Recordó que este año se realizó en Nueva York el Foro del Agua, donde la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) señaló que, dado que no se hicieron las inversiones necesarias en el subsector recomendadas en años anteriores y como ahora las necesidades son mayores, debido a que envejeció la infraestructura existente, ahora se requiere una inversión pública y privada equivalente a 1.3% del PIB para garantizar la transición hídrica sostenible.Eso significa que México debería invertir alrededor de 430,000 millones de pesos anuales durante 10 años, pero solo para abatir el rezago existente, pues a 2030, todo parece indicar que no se van a cumplir las metas de los ODS.

El consultor Hugo Roberto Rojas Silva explicó que para 2024 se pretende invertir alrededor de 55,433 millones de pesos para obras de infraestructura para el agua, distribuidos de la siguiente manera:

  • 35,343.43 millones de pesos, contemplados en el ramo 16 Medio Ambiente y Recursos Naturales.
  • 2,612 millones de pesos de Proagua, que es el que se asigna a operadores municipales.
  • 9,478 millones del programa Provisiones para el desarrollo de infraestructura hidráulica.
  • 8,000 millones de pesos, proveniente de organismos locales.

Sonora, Nayarit y Sinaloa, principales beneficiados

De los 35,343.43 millones de pesos del Ramo 16 Medio Ambiente y Recursos Naturales (ya descontada la partida para oficinas administrativas) 20,024 millones (la mayor parte de los recursos) son para el renglón de Infraestructura para la modernización y rehabilitación de riego y temporal tecnificado; 10,791.70 millones para Infraestructura de agua potable, alcantarillado y saneamiento; 3,936.20 millones para Infraestructura para la Protección de Centros de Población y Áreas Productivas y 591.53 millones para Rehabilitación y Modernización de Presas y lo que llaman estructuras de cabeza.

Al respecto, Hugo Rojas destacó que esos proyectos tienen que ver con mantenimiento de presas, construcción de acueductos, pero la infraestructura, ya dentro de las ciudades corresponde a estados y municipios.

Según el proyecto de presupuesto para 2024, el gasto en infraestructura del gobierno federal se concentra en 13 estados. De los 20,024 millones de pesos, que es la bolsa más grande y está etiquetado para infraestructura para la modernización y rehabilitación de riego y temporal tecnificado, sólo beneficiará a Sinaloa, Nayarit y Sonora.

El más grande es el Proyecto Baluarte-Presidio, Presa Santa María, Estado de Sinaloa, al que se le asignarán 7,326 millones de pesos y los otros dos que le siguen, con 5,000 millones de pesos cada uno, son Construcción del Canal Centenario, Nayarit y Ampliación del Distrito de Riego 018 del Pueblo Yaqui, Estado de Sonora.

En tanto, en el de infraestructura de agua potable, alcantarillado y saneamiento con una bolsa de 10,792 millones de pesos se distribuyen en Guanajuato, Jalisco, Ciudad de México, Hidalgo, Nuevo León, Baja California, Coahuila, Durango, Sonora, Sinaloa y Michoacán. De este grupo destaca la obra Agua Saludable para la Laguna con un presupuesto de 5,911 millones de pesos.

Proagua tendrá reducción de 23% en su presupuesto

A esas cifras habría que sumarle lo contemplado al Programa de Agua Potable, Drenaje y Tratamiento (Proagua), a cargo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al que se le destinarán 2,612 millones de pesos. Esos recursos son los que se asigna a operadores municipales. En 2016 a ese programa se le destinaron 12,500 millones de pesos a precios de 2018.

Rojas Silva destacó que para 2024 Proagua tendrá una reducción de 23.78% respecto al ejercido en 2023, cuando tuvo 3,4377 millones de pesos.

El especialista llamó la atención en que, si se observa la repartición entre las 32 entidades federativas, 28 entidades tendrán un incremento de 4.83%, aunque los montos varían considerablemente de un estado a otro.

Por ejemplo, Guerrero, tendrá 500 millones de pesos; Estado de México 198 millones y Ciudad de México 132 millones, mientras que Puebla no contará con recursos y Nayarit sólo tendrá 522 pesos; colima 16 millones y Tlaxcala 20 millones.

La Ciudad de México y Guerrero, tendrán los mayores incrementos respecto de 2023 y serán de 63.16 y 338.23% respectivamente. Dijo que no están claros los criterios de repartición.

Órganos locales tendrán inversiones mínimas en infraestructura

Por otra parte, el programa Provisiones para el desarrollo de infraestructura hidráulica, que en 2023 tuvo un presupuesto de 1,106.3 millones de pesos, para 2024 tendrá un incremento de alrededor de 8,000 millones de pesos pues tendrá 9,478 millones de pesos, aunque parece ser que serán destinados, principalmente a obras hidráulicas que tienen que ver con obras prioritarias presidenciales.

Si bien a todas esas inversiones en infraestructura habrá que sumarle la cantidad de recursos que invertirán para ese fin los estados y municipios, será una cantidad menor, pues 98% de los operadores locales están en números rojos.

Según datos de la Secretaría de Hacienda, en 2022, esos organismos locales, obtuvieron ingresos por cobro del servicio de agua por 82,000 millones de pesos, de los cuales solo 10% lo destinan a inversión.

Eso permite suponer que lo que podrían sumar en inversión para 2024 serían alrededor de 8,000 millones de pesos.

Rojas Silva subrayó que las dos áreas en donde están los mayores retos en materia de inversión son la rehabilitación de las redes de distribución, ya que es donde actualmente se pierde alrededor de 40% del agua que llega a las ciudades y el saneamiento, debido a que alrededor de 30% de las plantas de tratamiento de aguas no cumplen con las normas en la materia.

Presupuesto anual de Conagua durante Gobierno de AMLO no alcanzó niveles de 2014 y 2015

Por otra parte, para 2024 el presupuesto para la Comisión Nacional del Agua será de alrededor de 62,985 millones de pesos, lo cual representa una reducción de alrededor de 5,500 millones de pesos respecto a lo aprobado para 2023.

Con ello se rompe una cadena de crecimiento del presupuesto observada de 2021 a 2023, particularmente para 2023, cuando el crecimiento respecto de 2022 fue considerable, al pasar de 33,900 millones de pesos a 68,485 millones de pesos.

La agencia de calificación de riesgos S&P Global Rating llama la atención que el presupuesto federal de 2023 casi triplicó el fondeo para infraestructuras hídricas de 15,300 millones de pesos a 44,500 millones, y duplicó aproximadamente el fondeo de la Conagua de 33,000 millones a 68,500 millones de pesos.

En el análisis de sostenibilidad titulado “Más estados mexicanos podrán verse afectados por estrés hídrico en 2050” señala: Esperamos que el gobierno federal, a través de dicha entidad, continúe financiando proyectos fundamentales de infraestructura en todo el país y atienda, en cierta medida, la vulnerabilidad de algunas regiones en materia de agua”.

Si se observan los datos de las cantidades destinadas anualmente a Conagua de 2012 a la fecha se observa que 2014 y 2015 (durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto) tuvo su presupuesto más alto, pues se aprobó 74,900 millones y 74,000 millones de pesos, respectivamente.

En 2018 la cifra fue de 33,900 millones de pesos y de ahí, ya en el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, fue bajando año con año, hasta llegar a 26,600 millones de pesos en 2021, para luego subir a 33,900 millones de pesos en 2022.

Al respecto, el presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento de la Cámara de Diputados, Gregorio Muñoz Álvarez, señaló que se debe revisar con las comisiones de Presupuesto y Cuenta Pública, y de Hacienda y Crédito Público, el recurso asignado por la Secretaría de Hacienda para 2024, porque no puede haber un presupuesto decreciente en un país que crece en más de un millón 300,000 habitantes al año y donde existen 21 millones de mexicanos que carecen de agua.

Por su parte el diputado Braulio López Ochoa Mijares expuso que se debe insistir en que el presupuesto para el agua se mantenga o incremente, ya que en la propuesta 2024 se reduce 45.7% para infraestructura de agua potable, alcantarillado y saneamiento y 23.3% para agua potable y drenaje, cuando sólo trabaja el 20% de las plantas de saneamiento del país y 28 millones de personas no tienen drenaje.

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